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Si comprendemos de dónde viene el sufrimiento (emociones aflictivas) y de dónde surge el bienestar (virtud), seguiremos de buen grado este camino como mapa para vivir una vida sana. Imaginemos que todas las personas, todas las organizaciones y todos los gobiernos se comprometieran a seguir este camino. Crearíamos una sociedad pacífica y un planeta sano. El cambio global parte de la responsabilidad individual. Cuando cambiamos, influimos en nuestra familia, amigos, compañeros de trabajo, comunidad y más allá.
El óctuple sendero es un mapa para despertar nuestra bondad innata. Se trata de un entrenamiento diario para orientar nuestras vidas de modo que cobren sentido y contribuyan al bienestar de los demás (por tanto, de forma inherente, a nuestra propia felicidad). El camino se divide en categorías denominadas "Los Tres Entrenamientos": conducta ética, meditación y sabiduría.
ENTRENAMIENTO EN LA SABIDURÍA:
El óctuple sendero se basa en la sabiduría de la interconexión, que se denomina "visión correcta". Toda la vida está vinculada de forma independiente. Nada existe por sí mismo, por lo que cada acción repercute en el todo. Esto nos lleva a la "intención correcta", en la que nos entrenamos para actuar de forma que beneficie a los demás, en lugar de simplemente beneficiarnos a nosotros mismos.
FORMACIÓN EN CONDUCTA ÉTICA:
Para ponerlo en práctica, desarrollamos un discurso amable, respetuoso y verdadero. Palabras que contribuyan a mejorar la sociedad, en lugar de causar daño. Naturalmente, nos sentimos inspirados para actuar en consecuencia, de manera que se produzcan beneficios en la vida cotidiana. Con este compromiso en mente, nos sentimos naturalmente movidos a vivir un estilo de vida y elegir un trabajo que esté en consonancia con nuestros valores.
ENTRENAMIENTOEN MEDITACIÓN:
Samadhisignifica concentración profunda, tranquila. Para que la sabiduría innata surja de forma natural, debemos cultivar una mente en calma. Esto requiere un esfuerzo diligente en nuestro compromiso con la conducta ética, y dedicación para actuar con alegría por el bienestar de los demás. Por lo tanto, el esfuerzo correcto es un apoyo para los tres entrenamientos. Desarrollamos la atención plena para recordar nuestro compromiso con la virtud y cultivar la conciencia aguda en nuestras acciones cotidianas. La concentración correcta consiste en entrenar la mente para que se centre en un único objetivo, sin dejar que la mente vague sin rumbo, perdida en pensamientos negativos o sin sentido. La atención plena recuerda aquello en lo que estamos concentrados, van de la mano.
Cada pilar del óctuple sendero está interconectado y es interdependiente. Te animamos a que contemples esta sabiduría y la introduzcas profundamente en tu vida. Estas son las causas directas del surgimiento de un mundo justo y próspero.
Para llevarlas a diario pregúntese: "¿Cómo puedo aplicar las 10 virtudes?".
